Un niño venezolano y su madre relatan cómo vivieron la discriminación y cómo han enfrentado retos para que no los rechacen.

 

Las redes sociales generar un alto impacto en las comunidades, generan un tipo de contenido toxico a diario por medio de memes, videos, audios  muy  pocas veces con aportes verdaderos. Esto ocasionando que la población genere prejuiciosos, algunas veces generan rechazo en otras ocasiones encuentran voz de aliento. Hay es donde nos preguntamos si los prejuicios sociales son infundados, si toda esta interacción de nuestros jóvenes  con las plataformas de comunicación los hacen odiar por el solo hecho  de ver un meme, o un video con la verdad sobre valorada. “la migración forzada es un movimiento de corta distancia que incrementa las condiciones de pobreza de los afectados” (Ruiz, N, 2010. p.142). En este sentido, desplazarse por obligación en cortas distancias aumenta las condiciones, como la pobreza, por las que usualmente los migrantes salen de sus lugares de origen en búsqueda de nuevas oportunidades y mejores condiciones. Jiménez (2011) realizó una investigación cualitativa sobre los problemas que se presentan en las familias cuando los padres (cabezas de hogar) migran a otros países. La autora afirma que la migración forzada “se deriva de situaciones extremas que la persona no puede controlar, para estas personas, salir del país se convierte en la única opción de supervivencia, o en la más prudente para preservar su vida e integridad” (p 78) Siguiendo ese orden de ideas, basta con recurrir a noticias para evidenciar que gran parte de la población migrante, en cualquier lugar, lo ha hecho para mejorar su calidad de vida y huyendo de crisis políticas, económicas, sociales, entre otras, del país de origen, en búsqueda de mejores oportunidades de cualquier ámbito, que se sobrepongan al doloroso, per se, hecho de migrar de su tierra natal. (Saganome 2021)

 “Saganome, D. A. (2021). Xenofobia en redes sociales hacia los migrantes venezolanos en Colombia en el marco de la emergencia sanitaria por el COVID-19 a partir del primer semestre de 2020. Recuperado de: http://hdl.handle.net/20.500.12010/21862.”